sábado, 28 de julio de 2012

Náufraga


Extraviado en su ruta
y haciendo aguas,
tu navío se hundió.
Lograste alcanzar la orilla
flotando a la deriva
aferrada a una
tabla de salvación
que te libró de
perecer ahogada.

Los años pasaron
y te volvieron más sabia
y más fuerte.
El retiro se convirtió
en edén;
la tragedia, en bendición;
y la isla desierta,
en isla del tesoro.
Explorando sus rincones
descubriste paisajes
paradisíacos
y desenterraste riquezas
de incalculable valor.

Hasta que un día,
avistaste un barco
y tus S.O.S embotellados
obtuvieron por fin respuesta.
Y ahora,
heroica superviviente,
te embarcas de nuevo
rumbo a un
prometedor horizonte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario